HISTORIA
DE LA BIOLOGÍA
Nota: (realizar un resumen)
LA
EDAD ANTIGUA
(HASTA
EL SIGLO V)
Hasta
los griegos el saber en Biología era de carácter popular, exceptuando
quizás los pueblos de Egipto y Babilonia donde (en relación con la
medicina y el embalsamamiento de cadáveres) se consiguieron
importantes avances en Anatomía y Fisiología animal
y humana.
Seiscientos
años antes de Cristo, apareció en la isla griega de Cos la primera
escuela dedicada a la Medicina. En
ella destaca Hipócrates (460-3
70 a. C.) quien consideraba que las enfermedades eran procesos naturales
que había que combatir ayudando a las propias fuerzas curadoras de la
Naturaleza.
Aristóteles
(384-322
a. C.) puede ser considerado como el primer biólogo. Estudió las
semejanzas y diferencias entre las diferentes especies de seres vivos y
realizó una primera clasificación, introduciendo términos como el de animales
con sangre y animales sin
sangre (equivalen a los de animales vertebrados y animales invertebrados).
Aristóteles
aplicó y difundió las ideas de Empédocles
de Agrigento (492-432 a. C.) para quien el mundo y sus habitantes
estaban formados por cuatro elementos: agua, aire, tierra y fuego.
Al observar los animales que surgían del lodo, de las ciénagas,
etc., Aristóteles supuso que muchos nacían por generación espontánea
tras la unión de tierra y agua y la interpenetración de una fuerza
vital. Para otros seres
superiores, consideró su
nacimiento mediante reproducción sexual.
El
prestigio de Aristóteles fue tan grande que durante los siglos
siguientes, prácticamente durante dos mil años, no se discutió
ninguna de sus afirmaciones en el campo de la Biología.
En
la Roma imperial cabe citar los nombres de Dioscórides,
uno de los primeros botánicos; de Lucrecio
y su obra De rerurn naturae; y de Plinio el Viejo
(23-79 d. C.), autor de una importante Historia natural en la
que se citan especies tanto reales como mitológicas o inventadas.
Posteriormente destaca Galeno (129-201), famoso par sus
aportaciones en el campo de la Medicina.
LA
EDAD MEDIA (SIGLOS
V-XV)
Entre
los Siglos V y X se produjo un serio retroceso de la cultura.
Exceptuando China y la India, aunque muchos de sus descubrimientos se
perdieron y debieron ser redescubiertos más tarde en Occidente.
Los árabes contactaron con estas culturas y con los textos clásicos
grecorromanos. Así,
tradujeron los libros de Hipócrates, Galeno y Dioscórides, durante el
siglo X, en Córdoba. En el
siglo XI comenzaron a surgir las Universidades, en las que se estudiaba
a Aristóteles, al que se le consideraba el maestro.
San
Alberto Magno (1206-1280),
que fue profesor de Santo Tomás de Aquino.
San Alberto realizó una clasificación de las plantas según sus
hojas y frutos, escribió una obra sobre animales en 26 tomos, descubrió
la función de las antenas de las hormigas para su
comunicación, la forma de tejer de las arañas, la necesidad de
incubación de los huevos de las águilas, etc.
Roger
Bacon (1214-1294),
fraile franciscano partidario de que en la investigación científica
los razonamientos teóricos nada prueban, que todo depende de la
experimentación (los resultados).
LA
ÉPOCA DEL RENACIMIENTO
El
Renacimiento tuvo su cuna en
Italia y allí donde surgieron los primeros trabajos científicos
serios, como los de Leonardo da
Vinc¡ (1452-1 519), que extendió su curiosidad investigadora a la
anatomía humana e intuyó la larga duración de las épocas pasadas, y
los trabajos de Andrés Vesalio (1514-1564), que basó sus estudios anatómicos en
la disección de cadáveres. En
esta época, el aragonés Miguel
Servet (1511-1553) descubrió la circulación sanguínea y William
Harvey
(1578-1657) completó este descubrimiento y demostró el mecanismo
de la circulación sanguínea en los circuitos mayor y menor.
Los
siglos XVI y XVII estuvieron muy influidos por el descubrimiento de América.
Las nuevas especies de plantas y animales polarizaron el interés
de los naturalistas, entre los que destacaron los sistemáticos John
Ray y Tournefort. Galileo Galilei (1564-1642) fue el autor de la primera Historia
natural de América, aunque es más conocido por sus descubrimientos
en Astronomía.
En
el siglo XVII, Francis Bacon (1561-1626)
realizó sus estudios basándose en la experimentación., e introdujo
las bases del método cualitativo-inductivo que tanto sirvió para la
elaboración de teorías e hipótesis durante el siglo XIX.
René Descartes (1596-1650),
autor del Discurso del método
(1631), desarrolló en esta obra las cuatro reglas de la investigación
científica.
Entre
los científicos más importantes de esta época destacan Red¡ (1626-1698), que se declaró contrario a la generación espontánea;
los hermanos Janssen, que
inventaron el microscopio a finales del siglo XVI; Malpighi (1628-1694), que Descubrió los capilares sanguíneos, los
alvéolos pulmonares, la circulación renal
(pirámides de Malpighi), etc.; y Robert
Hooke (1635-1703), que introdujo el término célula.
EL SIGLO XVIII
En
el
siglo XVIII, la mayoría de los científicos eran partidarios de un
cambio: frente a las ideas anteriores, consideraban la ciencia como la
única vía objetiva de conocimiento.
Este espíritu quedó reflejado en la Enciclopedia de
las Artes y de las Ciencias de Diderot
(1713-1784) y D'Alembert (1717-1783),
obra en la que se resumió todo el conocimiento científico, tanto en
Biología como en las otras ramas del saber.
Entre
los científicos del siglo XVIII mencionaremos a Van
Leeuwenhoek (1632-1723), descubridor de los protozoos y
primer observador de células como los glóbulos rojos, los
espermatozoides y las bacterias; T. Needham (1731-1789), defensor de la generación espontánea, y Spallanzani
(1729-1799), detractor de la misma.
El
siglo XVIII es el siglo de los grandes viajeros y sistemáticos.
Entre ellos destaca el sueco Karl
von Linné (1707-1778), fijista y aristotélico, que
ideó la nomenclatura binomial de género y especie, actualmente
en uso, y
clasificó los animales y las plantas en las sucesivas ediciones de su obra Sistema
naturae. Esta obra
sirve de base a la sistemática actual.
EL SIGLO XIX
Tras
el siglo XVIII en el que la mayor actividad de los biólogos se
desarrolló en el campo de la sistemática, en un intento de clasificar
las especies procedentes del Nuevo Mundo, se suscitó en el siglo XIX
una interpretación, basada en la razón, tanto de la aparición de las
diferentes especies como de su distribución y parentesco.
Así surgió la teoría evolucionista, uno de cuyos primeros
defensores fue el francés Jean-Baptiste
Lamarck (1744-1829), que explicaba su hipótesis basándose en dos
principios: «la necesidad crea el órgano y su función lo desarrolla», y «los caracteres adquiridos se
heredan».
Esta
teoría chocaba, por un lado, con la crítica de quienes pedían datos,
experiencias, etc., que la confirmaran y, por otro, con la opinión del francés Georges
Cuvier (1769-1832), considerado como el padre de la Paleontología y
de la Anatomía comparada, Cuvier era fijista, es decir, creía en la
inmutabilidad de las especies. Para
explicar la desaparición de especies que sólo existieron en el pasado
y de las cuales sólo quedan restos fosilizados suponía que hubo una
serie de catástrofes sucesivas que produjeron su extinción.
Posteriormente, después de cada catástrofe se desarrollaba una
nueva y distinta creación.
En
1859, el naturalista inglés Charles Darwin
(1809-1882) publicó El origen de las especies. En este libro recogió
las conclusiones a que había llegado durante el viaje científico que
muchos años antes había realizado por todo el Nuevo Mundo a bordo del
Beagle. La teoría de Darwin se apoyaba en dos puntos: la
variabilidad de la descendencia y la selección natural o,
dicho de otro modo, la supervivencia del más apto.
Schwann
(1810-1882)
y Schleiden (1804-1,881),
destacaron en Histología
por enunciar la teoría celular.
En Microbiología, Pasteur (1822-1895) llevó a cabo
experimentos definitivos sobre la irrealidad de la generación espontánea,
descubrió que algunos microorganismos tenían carácter patógeno, aisló
el bacilo del cólera de las gallinas, dedujo el concepto de inmunidad y
descubrió la vacuna antirrábica. Posteriormente, Robert Koch
(1843-1910) aisló el microbio que producía el carbunco, el bacilo de
la tuberculosis y el microbio del cólera.
En 1865, el médico escocés Josepli
Lister (1827-1912)
descubrió que la infección de las heridas se debe a las bacterias y en
1867 utilizó el fenol para crear un ambiente bactericida en la sala de
operaciones. En 1884, el médico
y bacteriólogo español Jaime Ferrán (1852-1929) descubrió la
vacuna contra el cólera. En
Fisiología destacó Claude Bernard (1813-1878), que puede ser
considerado como el padre de la Fisiología.
En 1865, el agustino Gregor Mendel (1822-1884)
publicó sus trabajos sobre las leyes que sigue la herencia biológica.
A
mediados del siglo XIX apareció el término «ecología» para designar
a una nueva rama de las Ciencias Biológicas.
Ernst Haeckel fue tal
vez el primero que definió esta ciencia. El zoólogo francés I.
Geoffroy Saint-Hilaire propuso
la denominación «etología» para el estudio de las relaciones de los
organismos dentro de la familia, de la sociedad en su conjunto y de la
comunidad.
EL SIGLO XX
En
el siglo XX se produjo una revolución científica por la aparición de
nuevos instrumentos, como el microscopio electrónico, que ha permitido
grandes avances en Citología e Histología, como a la gran cantidad de
personas y grupos de investigación que se dedican a la ciencia en todo
el mundo. Son tantos estos
avances que a continuación vamos a enumerar los más significativos:
-
1900, De Vries, Correns y Tschermack, redescubrimiento de las Leyes de Mendel.
-
1903, Batteson y Punnet, concepto de interacción genética.
-
1904, Pavlov, fisiología de la digestión.
-
1905, Koch, bacilo de la Tuberculosis.
-
1906, Golgi y Ramón y Cajal, trabajos en Citología.
-
1911, Morgan, recombinación genética y mapas cromosómicos.
-
1922, Meyerhof, paso del Glucógeno a Ácido láctico.
-
1923, McLeod y Banting, descubrimiento de la insulina.
-
1924, Oparin, hipótesis del origen abiótico de la vida.
-
1927, Muller, efecto mutágeno de los Rayos X.
-
1929, Fleming, descubrimiento de la Penicilina.
-
1941, Beadle y Tatum, relaciones entre genes y enzimas.
-
1953, Watson y Crick, estructura de la doble hélice de ADN.
-
1959, Ochoa, descubrimiento de la ARN-polimerasa.
-
1959, Kornberg, descubrimiento de la ADN-polimerasa.
-
1964, Bloch y Lynen, metabolismo de lípidos.
-
1965, Jacob y Monod, funcionamiento de los genes.
-
1978, Mitchell, hipótesis quimiosmótica.
-
1987, Tonegawa, diversidad de los anticuerpos.
-
1989, Altman y Cech, propiedades catalíticas del ARN.
-
etc...
No hay comentarios:
Publicar un comentario